Bioko, situada en el Golfo de Guinea en las proximidades de la desembocadura del rio Níger, es la mayor de un pequeño archipiélago de cuatro islas pertenecientes a Guinea Ecuatorial. Con una extensión de poco más de dos mil kilómetros cuadrados, fue conocida hasta el final de la época colonial, en 1968, como Fernando Poo, en memoria del explorador portugués que arribó a sus costas a finales del siglo XV.
Desde el último tercio del siglo XVIII, el interés colonial español por Bioko y sus territorios adyacentes estuvo íntimamente vinculado a las necesidades de las colonias españolas en América, fundamentalmente de Cuba.